1 – La intención de voto por partido, sin mencionar candidatos A la pregunta “Si las elecciones nacionales fueran el próximo domingo, ¿a qué partido votaría?”, las respuestas espontáneas (sin leer nombres de partidos ni posibles candidatos) fueron las siguientes: un 38% votaría al Frente Amplio, un 23% al Partido Nacional, un 14% al Partido Colorado, un 3% al Partido Independiente, un 1% a Asamblea Popular, un 9% votaría en blanco o anulado, y un 13% no sabe o no contesta la pregunta. (NOTA: las sumas pueden no dar exactamente 100% debido a los redondeos).
Es importante resaltar algunas cuestiones metodológicas importantes para el análisis de estos datos: En primer lugar, cuando se pregunta por la intención de voto, los resultados suelen diferir en función de cómo se formula la pregunta. En nuestros 15 años de encuestas de opinión pública, siempre la intención de voto ha sido mayor al ponerle nombre y apellido a las candidaturas que cuando preguntamos simplemente por partido. Lo que se reduce al mostrar una lista de candidatos en vez de partidos es el número de personas que no saben y el de personas que votarían en blanco o anulado. En los resultados que presentamos en este capítulo sólo está la intención de voto por partido. También es importante destacar que frecuentemente se les “repregunta” a quienes afirman que votarían en blanco o anulado y a quienes dicen no saber a quién votarán, por ejemplo de qué dirigente político se sienten más cercanos, o a cuáles rechaza más; de esta forma se deduce a qué partido es más probable que terminen votando. En estos resultados no se «repregunta» nada, ya que uno de nuestros objetivos era comparar la intención de voto por partido con la que surge al mostrar escenarios probables de primera vuelta. Estas dos consideraciones hacen que el porcentaje de “indecisos” y el de votos en blanco y anulados sean tan elevados (recordemos que el voto en blanco y anulado nunca resulta significativo en las elecciones nacionales en Uruguay). Hace casi un año realizamos el mismo estudio con la misma metodología y un tamaño de muestra prácticamente idéntico, y los resultados muestran la siguiente evolución «entre puntas: 1) El Frente Amplio baja dos puntos su intención de voto, de 40% a 38%; 2) El Partido Colorado mantuvo la suya en 14%; 3) El Partido Nacional crece 2 puntos, de 21% a 23%; 4) Crece el Partido Independiente de 2% a 3%; 5) Disminuyen muy levemente los «indecisos » (voto en blanco, anulado, no sabe y no contesta) de 23% a 22%. En suma, el único partido que crece, tanto a expensas del FA como de los indecisos es el Partido Nacional (y algo el Partido Independiente, aunque en valores aun bajos), aunque la suma de los dos partidos fundacionales sigue sin superar al Frente Amplio. El cuadro a continuación muestra algunas diferencias interesantes entre segmentos de población: la intención de voto hacia el Frente Amplio es seis punto mayor en Montevideo que en el Interior (41% contra 35%). La del Partido Colorado es prácticamente idéntica en ambas zonas geográficas. Y la del Partido Nacional es nueve puntos mayor en el Interior que en Montevideo (27% contra 18%). Esto significa que el Partido Nacional obtendría casi un 70% de sus votos del interior y solo un 30% de Montevideo. La otra segmentación que muestra diferencias interesantes es la edad. Si establecemos un primer corte en 29 años y un segundo corte en 64 años (ambos son arbitrarios), vemos que el segmento más jóven es el más indeciso (o descreído): un 30% afirma que votará en blanco, anulado o que no sabe a qué partido votará. También es el segmento en el que los dos partidos fundacionales obtienen el menor porcentaje de adhesión. En cambio, el segmento de los mayores de 64 años es el que más adhiere a estos dos partidos: 27% al PN y 25% al PC, contra un 29% para el FA. La variable Nivel Socioeconómico no parece incidir significativamente en la intención de voto. A modo de ejemplo, el FA obtiene exactamente el mismo porcentaje en los tres niveles que han sido definidos a los efectos de este informe. Finalmente, el FA sigue siendo, como en elecciones anteriores, quien más parece «retener» a sus votantes de la elección anterior: 76% de quienes lo votaron en 2009 afirma que lo volvería a votar, porcentaje que baja al 71% en el caso del PN y al 72% en el caso del PC.
2 – La intención de voto frente a escenarios probables de primera vuelta La situación cambia si se le pone nombre y apellido a los candidatos de los partidos. A la pregunta «Si las elecciones nacionales fueran entre Tabaré Vázquez, Jorge Larrañaga, Pedro Bordaberry y Pablo Mieres, ¿a cuál de ellos cree que votaría?». la intención de voto de Vázquez aumenta 4 puntos en relación a la del FA (42%), mientras que la de Pedro Bordaberry aumenta 1 punto en relación a la del PC (15%) y la de Jorge Larrañaga cae dos puntos en relación a la del PN (21%). La suma de votos en blanco, anulados, y «no sabe/no contesta» cae 3 puntos en relación a la pregunta por partido.
Si el escenario fuera con Luis Lacalle Pou en lugar de Jorge Larrañaga, Tabaré Vázquez obtendría un punto menos (41%), Bordaberry un punto más (16%), y Lacalle obtendría un punto más que Larrañaga (22%).
Resulta interesante que en cualquiera de los dos escenarios, al poner nombres a las candidaturas, el Frente Amplio es quien más se beneficia («Vázquez» obtiene cuatro puntos más que «Frente Amplio»), seguido por el Partido Colorado. En cambio «Partido Nacional» obtiene una mayor intención de voto que cualquiera de sus dos posibles candidatos. Esto se nota muy claramente al cruzar la intención de voto por partido por la intención de voto por candidato: cerca de la cuarta parte de quienes votarían al Partido Nacional no votaría ni a Lacalle Pou ni a Jorge Larrañaga. Esto se debe relativizar ya que el Partido Nacional es el único que actualmente presenta un importante nivel de competencia por la candidatura y es probable que, luego de la interna, quien finalmente resulte electo consiga «reunificar» los votos del partido.
FICHA TECNICA Esta encuesta fue realizada entre el 18 de junio y el 18 de julio de 2013 a una muestra nacional de 1617 personas, representativa de toda la población mayor de 18 años. Todas las encuestas se realizaron cara a cara en los domicilios de los entrevistados. Se realizaron encuestas en 61 localidades: en todas las de más de 20.000 habitantes, y en una muestra elegida aleatoriamente de las demás. En cada localidad se sortearon segmentos censales y manzanas al azar, en las que se aplicaron las encuestas según una cuota determinada por cada manzana y una rutina predefinida para respetar la mayor aleatoriedad posible. En particular, se respetó en la muestra el porcentaje de la población que vive en asentamientos según los últimos datos disponibles del INE. El margen de error máximo cuando se trabaja sobre el total de la muestra es de ±2.4 para un nivel de confianza del 95% y una incidencia del 50%. En caso de trabajar sobre sub-muestras (por ejemplo por zona geográfica o por rango de edad), el margen de error aumenta. Esta encuesta es multiclientes, lo que significa que no fue contratada en exclusividad por ninguna empresa, medio, o partido político.